En la urbanización de Somosaguas, en las afueras de Madrid, se ha proyectado una renovación completa y ampliación a una vivienda construida en los años 60 y diseñada por el arquitecto Luis Gutiérrez Soto. Respetando la disposición y geometría original de la vivienda, posada sobre una plataforma y en una sola planta, se ha reformulado el espacio, incorporando un nuevo cuerpos hacia el Norte, con la biblioteca y las habitaciones. Se ha modificado el funcionamiento interior también, con una nueva cocina asociada a un invernadero-desayunador orientado a levante, un nuevo comedor, y un nuevo acceso a través de un patio de entrada cercado por una celosía de ladrillo. Una importante operación, ha sido la modificación de toda la estructura de cubierta, manteniendo la belleza de los muy tendidos faldones, pero sustituyendo la pizarra por una teja plana y eliminando los falsos techos para ganar altura y movimiento mostrando las inclinaciones de los diferentes paños de cubierta al interior. Además se han construido dos pabellones que cierran el jardín y la zona de piscina, con un comedor de verano, un gimnasio y un estudio.
Construida con muros de fábrica de ladrillo macizo, carpinterías de cedro y solados de caliza y roble, se asoma a poniente sobre el maravilloso jardín diseñado por Luis Vallejo y su equipo, desde su posición de silencioso vigía.